Hace unos días publiqué una foto con esta planta.
Sin darme cuenta que por el ladito, había una pequeña hojita creciendo.
Hoy, está más grande y me hizo pensar: NO IMPORTA EL TIEMPO QUE TARDES EN CRECER, en el conocimiento de la Palabra de Dios.
La buena noticia es que SIEMPRE VAS A CRECER, sí y sólo sí, te mantienes firme y pegado a ella.
“Hijo mío, está ATENTO a mis palabras; INCLINA tu oído a mis razones. No se aparten de tus ojos; GUÁRDALAS en medio de tu corazón; Porque SON VIDA a los que las hallan, y MEDICINA a todo su cuerpo.» Proverbios 4:20-22.